La historia del arte abarca desde las primeras expresiones creativas del ser humano en la prehistoria hasta las complejas instalaciones contemporáneas. Las pinturas rupestres de Altamira y Lascaux son ejemplos tempranos de arte, revelando la importancia de la caza y las creencias espirituales en las sociedades paleolíticas.
En el mundo antiguo, civilizaciones como Egipto, Mesopotamia y Grecia produjeron obras monumentales y detalladas. Las pirámides de Giza, los zigurats de Ur y el Partenón de Atenas destacan por su ingeniería y estética, reflejando la religiosidad y el poder de sus sociedades.
Durante la Edad Media, el arte románico y gótico dominó Europa, con catedrales como Notre-Dame de París y frescos bizantinos de iglesias ortodoxas. La iconografía cristiana y las innovaciones arquitectónicas de este período subrayaron la influencia de la religión en la vida cotidiana y la cultura.
El Renacimiento marcó un renacimiento del arte clásico en Italia, con maestros como Leonardo da Vinci y Miguel Ángel. El arte barroco, caracterizado por su dramatismo y ornamentación, siguió en el siglo XVII, con artistas como Caravaggio.